A cualquier hora del día y estación del año el brillo luce increíble en la piel. Los diversos tipos de maquillaje que tienen como protagonista un producto luminoso se encuentran en la cúspide de los infalibles para el día o la noche. Un simple iluminador, bronzer, base con efecto glow, o las mismísimas sombras líquidas, tienen el poder de revitalizar el rostro de una manera impecable y natural.
El efecto megaluminoso o ligeramente brillante que emula a un queridísimo filtro de Instagram se puede obtener con diferentes técnicas eligiendo el producto que más se adapte al color de piel. La mezcla entre sustancias líquidas, los polvos iluminadores, o los bronzers son algunos de los aliados para localizar ese resplandor sobre la tez.
Ese sutil tono brillante se consigue a través de distintos productos; sin embargo, el iluminador es el que usualmente se utiliza. Un estudio de 2019 de una universidad bogotana, indica que el highlight o iluminador resalta algunas zonas del rostro como los pómulos o el arco inferior de las cejas. Además, se puede conseguir en polvo, en líquido o en crema, depende del grado de luminosidad que se desee.
Yo apuesto por…
El iluminador en polvo es ideal para la piel grasa y se aplica con una brocha plana por encima de la base o compacto. También, se puede optar por el líquido, que, incluso, se difumina con mayor facilidad y su uso es súper versátil, pues es posible mezclarlo con la base con el fin de obtener un efecto luminoso en toda la tez, así como emplearlo debajo de este producto o por encima. Por otro lado, el highlight en crema es lo más parecido a un blush con la misma textura, pero con más brillo, y su uso es exclusivo para todo tipo de cutis.
No obstante, también existen otros aliados para lograr ese efecto glow tan poderoso. Las sombras líquidas que ahora tienen un importante papel en los tutoriales de maquillaje, son el producto estrella para obtener una mirada iluminada. Y es posible elegir cualquier tipo de color siempre que este cuente con mucha purpurina. Son fáciles de aplicar y la duración es más duradera en el párpado o en la zona inferior del ojo. También se puede utilizar como eyeliner para aportar un toque glamuroso y destellante.
Por una piel más reluciente
Una ideal exposición del producto en el rostro depende de la técnica que se emplee para obtener ese maquillaje uniforme y natural, propio del efecto glow. La piel semi-bronceada emulando un perfecto Sun Kissed o un rostro totalmente nacarado siempre optando por la naturalidad y, como principal punto, la luminosidad. En este sentido, es importante seguir una serie de pasos para realzar y revitalizar el rostro de una manera sana y eficaz:
*Paso 1: Aplicar protección solar con un SPF de 50 o más.
*Paso 2: La hidratación es fundamental para mantener una piel radiante. Así que es vital utilizar un tipo de crema que se adapte a la piel.
*Paso 3: Aplicar la base o, a priori, la BB cream o CC cream para lograr un tono uniforme del mismo color de la piel.
*Paso 4: Los polvos sueltos son un buen aliado para que la tez luzca más fresca. Posteriormente, se colocan las sombras, ligeramente se difumina por el párpado. Para que el maquillaje parezca natural, lo ideal es optar por sombras líquidas o en polvo de colores pasteles o claros como los nudes o rosas.
*Paso 5: Llegó el momento de darle color a los pómulos y al contorno del rostro aplicando ligeros toques de bronzer y colorete. Luego, se añade el iluminador líquido, en polvo o crema. El líquido también se puede colocar, como se menciona anteriormente, justo antes de la base o mezclarlo con la misma.
Por último, solo queda aplicar la máscara de pestañas, aunque este paso es inevitable para todas. Asimismo, hay miles de técnicas para conseguir un maquillaje natural y resplandeciente, solo tienes que saber cuales son los productos más acertados que conjuguen perfectamente con la piel.
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